La histeroscopia (HSC) es la mejor técnica para ver el útero por dentro. Si tienes problemas de esterilidad, menstruaciones abundantes o ante cualquier sospecha por ecografía, ésta es la mejor prueba para averiguar qué está pasando.
¿Cómo se realiza la histeroscopia?
Para ver dentro de la cavidad uterina, usamos un instrumento muy fino llamado histeroscopio, al que hemos acoplado una cámara de televisión y una luz (fibra óptica). Al mismo tiempo distendemos la cavidad con líquido (glicina o suero fisiológico) para poder ver con claridad.
Por tanto, vemos en la pantalla qué ocurre dentro del útero. Habitualmente, ves las imágenes al mismo tiempo que el ginecólogo y te las puede comentar.
¿Cuantos tipos de histeroscopia hay?
1.- HSC diagnóstica:
Es la más sencilla. Se realiza sin anestesia incluso en la propia consulta del ginecólogo. Es por tanto una prueba diagnóstica ambulatoria (no necesita ingreso hospitalario) y de gran capacidad diagnóstica.
Se utilizan histeroscopios muy finos de entre 3 y 5 mm de grosor.
Aunque es diagnóstica, permite la introducción de unas pequeñas pinzas y tijeras para tomar biopsia. En algunos casos permite también la introducción de un pequeño electrodo de apenas un milímetro de grosor. Con él podemos cortar o coagular pequeños pólipos, por ejemplo.
La histeroscopia diagnóstica es la más usada y a la que habitualmente nos referimos en este artículo.
Tumbada en la camilla de exploración, introducimos la óptica por vía vaginal. No requiere puntos y suele durar unos 15 minutos.
Terminada la prueba te vas a casa, sin mayores problemas. No requiere anestesia.
No debes estar con la menstruación pues la sangre dificulta la visualización.
2.- HSC quirúrgica:
Es una técnica de tratamiento. Empleamos un histeroscopio de mayor calibre, unos 7-8 mm, y por tanto requiere anestesia (epidural o raquídea).
Se realiza en quirófano y requiere preoperatorio.
Permite cortar y coagular mediante la introducción un electrodo con corriente eléctrica. Se emplea para extraer miomas, pólipos, tabiques, etc. de dentro del útero.
¿Cuando te la indicamos la histeroscopia?
Menstruación excesiva o sangrados uterinos anormales
Esta es una de las principales indicaciones. Tanto si tienes reglas abundantes, como si sangras entre dos reglas o estás en menopausia, es la mejor prueba diagnóstica. Nos informa sobre si existe un mioma, pólipo o incluso un cáncer.
En la mayoría de los casos tomamos biopsia para su estudio. Si el mioma o pólipo son grandes, te citamos para extirparlo por histeroscopia quirúrgica con anestesia.
Esterilidad e infertilidad
Permite saber si tienes alguna malformación uterina o cualquier problema que pueda afectar a tu reproducción. Si al hacer una histerosalpingografía existe alguna sospecha clínica, tu ginecólogo indicará una HSC.
Sospecha de patología por ecografía.
Permite confirmar las sospechas de miomas o pólipos por ecografía. Si estos son pequeño incluso los podemos extirpar en ese momento.
Extracción de DIU
Los DIUs se extraen tirando de los hilos que asoman por el cuello del útero. En algunos casos estos hilos no se ven y necesitamos la HSC para extraerlos con unas pequeñas pinzas.
Adherencias intrauterinas
Los legrados, cirugías previas o infecciones pueden ocasionar adherencias dentro del útero (sinéquias o Síndrome de Ashermann). La HSC permite extirparlas o seccionarlas.
Esterilización
Actualmente, la esterilización femenina se realiza mediante la colocación dentro de la trompa, por histeroscopia, de unos dispositivos tipo Essure. Estos dispositivos, conocidos coloquialmente por «muelles», obstruyen la trompa y evitan que te quedes embarazada. Se trata por tanto de un método de anticoncepción definitivo.
Contraindicaciones de la histeroscopia
- Embarazo
- Infección vaginal reciente
- Antecedente perforación uterina reciente
Complicaciones menores
- Leve dolor en bajo vientre tipo cólico, como calambres
- Sensación de hinchazón abdominal
- Sección de mareo y de bajada de la tensión (cuadro vagal o síncope)
- Sangrado escaso durante unos días
- Imposibilidad de entrar al útero por la estrechez de cuello del útero (estenosis) o dolor. En este caso, se te programa la prueba nuevamente, pero con anestesia.
Complicaciones mayores (excepcionales)
- Perforación del útero y/o lesión de algún órgano adyacente
- Infección del útero o de las trompas
- Sobrecarga circulatoria por paso del líquido de distensión a los vasos sanguíneos (en el caso de HSC quirúrgica)
- Derivadas de la electricidad (si se usa electrodo)
- Derivadas de la anestesia (si se usa anestesia)
Conclusiones
Es una técnica sencilla, que permite diagnosticar fácilmente problemas ginecológicos que afecten a la cavidad del útero y tomar biopsias.
En pocos minutos, te vas a casa con muy escasas molestias o sangrado. La incorporación al trabajo y a tu vida habitual se produce al día siguiente, sin mayores consecuencias.
El día de la prueba puedes estar con molestias que ceden con un antiinflamatorio habitual.