El riesgo de parto prematuro es una de las batallas obstétricas actuales. La prematuridad afecta a más del 5% de los embarazos.
Como siempre en medicina, lo mejor es prevenir. Hoy sabemos que los bebés prematuros tienen más riesgo de complicaciones. Sabemos también que la frecuencia de partos prematuros es alta, superior al 5% (varía de unos países a otros, por supuestos), y que va en aumento.
Los factores de riesgo siguen incrementándose, pese a los esfuerzos de ginecólogos, matronas, y todo el sistema sanitario.
En el artículo de hoy te quiero dar consejos para reducir tu riesgo de parto prematuro. Si el tema te interesa puedes ver cómo se diagnostica y cómo se trata en otros artículos anteriores.
Cuándo hablamos de reducir el riesgo te hablo de factores que sean modificables. Piensa, por ejemplo, que uno de los factores de riesgo es el ser de raza negra, y no es modificable.
Consejos para reducir el riesgo de parto prematuro
Control de tu peso
Hoy sabemos que las mujeres con exceso, obesidad, o defecto de peso tienen mayor riesgo de parto prematuro.
El consejo es hacer una visita preconcepcional y tu ginecólogo te orientará. Recuerda que debes de corregir al alza o a la baja (según tu caso). Una dieta equilibrada y ejercicio son la base del normopeso.
Edad de la madre
Si buscas gestación, intenta hacerlo en la mejor edad. Las pacientes adolescentes o mayores de 40 años tienen mayor riesgo de parto prematuro (entre otros).
Por desgracia, a veces la vida no nos deja elegir.
Embarazos gemelares
Te preguntarás qué puedo hacer si traigo gemelos. En el caso de gemelos de concepción espontánea no puedes hacer nada para la prevención. Pero hoy día se cuestiona, si en las técnicas de reproducción asistida es mejor poner uno, dos o tres embriones.
En pacientes que a priori se evalúan con un riesgo alto de complicaciones en la gestación, conviene valorar introducir un solo embrión en el caso de la reproducción asistida.
Hábitos
Aquí quiero llamarte la atención sobre llevar una vida sana, con dieta equilibrada. Ya te he comentado que el exceso de peso o su defecto favorece la aparición de parto prematuro.
Una dieta rica en frutas y verduras, con los suplementos adecuados de ácido fólico y, en algunos casos suplementados con omega-3, pueden reducir tus riesgos.
Por supuesto, el tabaco y otros tóxicos deben de ser evitados.
Control preconcepcional de tu salud: anemia, diabetes, etc.
Siempre recomendamos una revisión preconcepcional, en especial si tienes algún problema como diabetes, anemia, etc.
Corregir la anemia favorece el que tu sangre pueda oxigenar a tu hijo durante la gestación de una forma adecuada y disminuye además el riesgo de parto prematuro.
Infecciones
Es muy aconsejable, evitar las infecciones. Hoy sabemos que las infecciones de orina, tan comunes durante la gestación, son un factor provocador de contracciones y amenaza de parto prematuro.
La presencia de vaginosis bacteriana, es decir, una alteración en la composición habitual de la flora vaginal, también favorece la aparición de parto prematuro. No solemos tratarla de forma generalizada en todas las embarazadas (con probióticos), pero sí debe tenerse en cuenta en mujeres con riesgo aumentado.
Patologías en el embarazo
Son inmumerables los problemas en el embarazo que favorecen la aparición de parto prematuro.
Complicaciones de la placenta, como la placenta previa o el desprendimiento, pueden terminar con un embarazo antes de su término.
Igualmente, complicaciones del líquido amniótico aumentan tu riesgo. Es frecuente que si tienes un exceso de líquido amniótico, polihidramnios, aparezcan contracciones antes del final de los 9 meses de embarazo.
Conviene poner énfasis especial a los casos en los que una madre ya ha tenido un parto prematuro en la gestación anterior. El riesgo para la gestación actual sería muy superior.
Cualquier embarazo de riesgo o con complicaciones tiene que llevarse con un cuidado especial.
Periodo intergenésico adecuado.
Es fundamental planificar las gestaciones, no solo acudiendo a la visita preconcepcional. El tiempo entre un embarazo y el siguiente (intergenésico) tiene unos mínimos.
Si has tenido un hijo no debes buscar el siguiente antes de 12-18 meses. Estos valores se duplican si el parto anterior fue mediante cesárea. Tu cuerpo tiene que tener un tiempo para poder recuperarse.
Como puedes observar son muchos los factores a vigilar y los embarazos con riesgo de parto prematuro en los que con controles, preconcepcionales y durante el embarazo, más frecuentes pueden terminar en su tiempo.