Saber la indicación de tu histerectomía es el primer paso para aceptar este tipo de operación tan especial y tan frecuente para ti cómo mujer.
La histerectomía es la segunda operación más frecuente en la mujer. La primera son las cesáreas, que suponen la terminación del 20-25% de los partos en España.
En Estados Unidos se realizan 500.000 histerectomías anuales. Impresionante, ¿verdad?. No debe extrañarte, que al ir a tu revisión, tu ginecólogo te indique la realización de una histerectomía (la extirpación del útero) si el problema radica en este órgano.
Ante estas cifras cabe preguntarse… ¿cuál es la razón? ¿Qué indicaciones son tan frecuentes cómo para necesitar hacerla a un número tan elevado de mujeres? Pues de ello te hablo en el artículo de hoy.
¿Cuál es la indicación de histerectomía?
Patología maligna
Obviamente, existen dos tipos de indicaciones. En el caso de la patología maligna es fácil de entender. Si tienes cáncer, el sentido común te hará decir… ¡quítamelo!
El cáncer de útero es el tumor genital más frecuente. Digo genital y no ginecológico, pues el cáncer de mama es aún mas frecuente.
La extirpación del útero es la base del tratamiento del cáncer uterino.
Pero, del mismo modo, el resto de los cánceres genitales (de ovario, de cuello de útero y de trompas) tienen como principal tratamiento la indicación de histerectomía.
Patología benigna
La indicación de histerectomía no es patrimonio del cáncer genital. Existen múltiples problemas que se solucionan con la histerectomía, pero cada vez tenemos más alternativas, y vamos reduciendo la frecuencia con la que se indica su realización.
El sangrado uterino excesivo y anemizante es una de las principales indicaciones. Es verdad que cada vez tenemos mejores fármacos y vías de administración, como es el caso de los dius hormonales, y su indicación se ha ido reduciendo.
La presencia de miomas es una de las indicaciones más frecuentes. Piensa que afectan a un 20-25% de las mujeres o más si tienes factores de riesgo. Los miomas se operan cuando crecen en exceso, dificultan que consigas embarazo, te dan problemas de sangrando excesivo o comprimen estructuras y órganos vecinos (vejiga e intestino).
La endometriosis es otra de sus indicaciones. Es una enfermedad en la que tienes regla fuera del útero. Se manifiesta con dolores importantes, esterilidad, quistes en los ovarios, etc. La endometriosis aparece en el 30% de las mujeres con esterilidad.
Las complicaciones en el parto pueden solucionarse con una histerectomía. La hemorragia en las horas siguientes al parto, por atonía o por retención de restos de placenta puede ser una de sus causas.
El prolapso uterino, o descenso de los órganos pélvicos (vagina y/o útero) hasta salir por la entrada de la vagina, se soluciona con la histerectomía por vía vaginal. Obviamente, existen otras alternativas.
La adenomiosis es una indicación cada vez menos frecuente. Se caracteriza porque las glándulas de la mucosa que tapiza el interior del útero (endometrio) se introducen en el espesor de las fibras musculares de la pared uterina. Los síntomas con sangrados excesivos y dolor menstrual.
¿Se puede evitar la indicación de histerectomía?
Ya te he comentado que la histerectomía es la operación más frecuente en la mujer no embarazada. Pero su frecuencia actualmente va en ligero descenso. ¿Cómo? Hoy día las alternativas van «descontado» casos.
No existe una única alternativa para reducir la tasa de histerectomías. Dependerá de la causa que provoca la indicación.
Cuando la indicación es la existencia de un cáncer, no hay alternativas. La cirugía es el pilar principal del tratamiento oncológico del cáncer genital. No obstante, sí quiero insistirte en la prevención. Por ejemplo, el uso del preservativo y de vacunas disminuye la infección por el virus del papiloma, causante del cáncer de cuello de útero. Revisa los artículos sobre los factores de riesgo del cáncer de útero, de cervix y de ovario, y trata de evitarlos.
Las indicaciones de histerectomía por sangrado uterino, miomas, y endometriosis están también en disminución. Muchos de los síntomas que puedes presentar con estas patologías mejoran con el uso de medicamentos (anticonceptivos), colocación de dius hormonales, embolización de arterias uterinas, o sencillas operaciones endoscópicas.
En los sangrados dentro del parto, la realización de un legrado, los fármacos para contraer el útero o la colocación de un balón intrauterino pueden evitar la extirpación.
En los prolapsos de útero, si la extirpación está contraindicada, podemos utilizar la colocación de pesarios (un aro de silicona colocado en la vagina).
Como puedes ver las alternativas (para problemas benignos) son cada vez más frecuentes, variadas y con mejores resultados. La histerectomía en estos casos se reserva solo como última opción tras agotar los métodos anteriores.
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